Público
Público

La candidata del PP en Zaragoza oculta su paso por una empresa que se fue a pique

Natalia Chueca pasó por Dedalus Aircraft, empresa que se fue a pique. Ahora, siendo concejal, ha compatibilizado su labor  en una entidad que tiene como cliente a uno de los principales contratistas del consistorio.

La candidata del PP a la Alcaldía de Zaragoza, Natalia Chueca, entre el actual alcalde y candidato a la Presidencia de Aragón, Jorge Azcón (i.), y el presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijoó (d.), durante un acto del partido en  la capital aragone
Natalia Chueca, entre el actual alcalde y candidato a la Presidencia de Aragón, Jorge Azcón, y Alberto Núñez Feijoó, durante un acto en la capital aragonesa el 1 de abril de 2023. Fabián Simón / EUROPA PRESS

El relato oficial de la carrera profesional de la candidata del PP a la alcaldía de Zaragoza en las próximas elecciones municipales, Natalia Chueca, tiene algunas lagunas: en su currículum oficial, en el que aparecen varias referencias a su paso por puestos directivos en empresas de comunicación y marketing, no aparece ningún rastro de otros episodios de su trayectoria cuyo resultado fue poco brillante. 

El CV oficial de Chueca, designada como candidata por el actual alcalde, Jorge Azcón, que competirá con Javier Lambán (PSOE) por la presidencia del Gobierno autonómico, omite el año largo en el que la primera pilotó la fase de declive previa a la liquidación de Dedalus Aircraft Distribution.

Se trata de una empresa creada para distribuir las avionetas que CAG (Composite Aeronautic Group) iba a fabricar en el polígono aeronáutico de Villanueva de Gállego (Zaragoza). Un complejo que nunca llegó a despegar pese a que la firma promotora, participada por Savia, la empresa de inversiones del Gobierno de Aragón, llegó a engullir doce millones de euros de fondos públicos a los que hay que sumar la emisión de avales por valor de otros seis.

Unos meses antes de ese despido colectivo, en mayo de 2010, nace Dedalus Aircraft Distribution, administrada en sus inicios por un clásico de los negocios en Aragón como el expresidente de Ibercaja José Luis Martínez Candial y por Álvaro Lapetra, actual esposo de Chueca. Ambos coincidían desde 2009 en Zara Air, una compañía del sector aéreo con sede en Zaragoza que a mediados de enero 2013 cambia su denominación por Tecnam Air, a la que el segundo sigue vinculado.

La empresa de distribución de avionetas 'made in Aragón'

La empresa, con 100.000 euros de capital social y con CNAE (Código Nacional de Actividades Económicas) de "comercio al por mayor de maquinaria", tenía como objeto social "el desarrollo de todo tipo de actividades aéreas, tanto de transporte como de trabajos aéreos, incluyendo la realización de vuelos ferry, consultoría y asesoramiento, compraventa, distribución, reparación y mantenimiento de cualquier tipo de aeronave y sus componentes, incluyendo motores".

Entre esas dos fechas tiene lugar el paso de Chueca por la dirección de Dedalus, como administradora solidaria con Martínez Candial tras el cese de Lapetra entre mediados de junio y de julio de 2011, y como única responsable entre julio de 2011 y de 2012, cuando Lapetra vuelve a hacerse cargo de la sociedad durante poco más de un año y antes de iniciar su liquidación.

En esta última etapa, y unos meses antes de entrar la liquidación, el Servicio de Inspección Tributaria del Ayuntamiento de Zaragoza se vio obligado a recurrir al boletín oficial para intentar cobrar una deuda ante la imposibilidad de notificársela por los cauces habituales.

El episodio y la posterior evolución de la sociedad, en liquidación a los tres años y medio de ser fundada y con una caída de ventas en picado en 2012 que se intensificó en 2013, encaja bastante con la definición que el diccionario ofrece para la expresión "irse a pique": "malogarse", que consiste en "no llegar al término deseado", a lo que "se pretendía o esperaba conseguir".

Este episodio no aparece reflejado en su CV oficial, en el que sí figura su paso por la empresa de juguetes Imaginarium en la misma época, entre 2005 y 2018, un detalle al que restaron importancia fuentes de su candidatura, que sostienen que su trayectoria profesional está correctamente recogida en el currículum oficial.

Una declaración de bienes sin salario por el segundo empleo

El de la empresa de distribución de avionetas no es el único aspecto del relato oficial sobre la candidata conservadora a la alcaldía de Zaragoza que resulta cuestionable en términos de transparencia.

Chueca, una de las concejalas que en esta legislatura no ha tenido dedicación exclusiva, ha compaginado su actividad como concejal con el puesto de directora de negocio de Bros Group, una empresa de headhunter o cazatalentos a la que se incorporó en la segunda mitad de 2019, unos meses después de haber sido elegida concejal.

Chueca ha compaginado su actividad como concejal con el puesto de directora de negocio de Bros Group

La cuestión es que en sus declaraciones de bienes no consigna ninguna cantidad ingresada como salario por ese empleo, algo que sí había hecho, por ejemplo, con la que obtuvo en su último año en Imaginarium o con las que se derivan de su trabajo como profesora en la escuela de negocios ESIC. 

Paralelamente, en las declaraciones de bienes de 20202021 y 2022 reseña en el apartado de "otras rentas", pero no en las de origen salarial, sendos ingresos de 14.935, 21.620 y 12.764 que consigna como "actividad", sin mayores explicaciones.

Esas cantidades, aparentemente bajas -y dispares- para un puesto de dirección de negocio, figuran en el apartado reservado para los ingresos procedentes de "pensiones, arrendamientos, conferencias, tertulias de radio, (o) derechos de autor", entre otras posibilidades. Ahí sí entrarían, por ejemplo, los rendimientos inmobiliarios de una eventual comunidad de bienes, aunque tampoco se reseña ninguna opción de ese tipo.

Ahorrar más de 14.000 euros y quitarse 9.500 de hipoteca 

Fuentes de la candidatura de Chueca restaron importancia también a este aspecto de sus declaraciones de bienes. De hecho, señalaron que la concejala "ha tenido dedicación parcial durante toda la legislatura" y que "todos los ingresos por actividades fuera del ayuntamiento están en su declaración".

Las declaraciones de bienes también muestran cómo la saneada situación económica con la que Chueca llegó al ayuntamiento en la primavera de 2019 todavía lo es más una vez transcurridos sus tres primeros años en la institución.
Entre 2018 y 2021, ejercicios a los que hacen referencia las declaraciones de 2019 y 2022, el patrimonio de Chueca creció a un ritmo de casi 14.500 euros anuales mientras su endeudamiento se reducía con una cadencia de 9.500; es decir, que su economía ha crecido 24.000 euros por año.

Apenas hubo variaciones en sus rentas, que pasaron de 79.976 a 77.920, no las hubo en su cartera inmobiliaria, que tiene un valor de 857.924 euros en seis propiedades compartidas, mientras sus inversiones en acciones se reducían de 17.082 a 12.759.

Las tres grandes mejoras se concentran en los depósitos de sus cuentas corrientes, que crecieron en casi 30.000 euros (de 45.690 a 75.398), en sus planes de pensiones, que aumentaron en 18.000 (de 14.850 a 32.850), y en sus hipotecas, que se redujeron en algo más de 28.500 (de 237.252 a 208.724).

Una multinacional en la cartera de clientes y en la de servicios

Por otro lado, fuentes municipales llamaron la atención sobre el hecho de que Bros Group tenga entre sus clientes a FCC, que es a su vez uno de los principales contratistas del Ayuntamiento de Zaragoza, en el que Chueca ha desempeñado a lo largo de esta legislatura la concejalía de Servicios Públicos y Movilidad, cuya gestión, por otra parte, ha estado marcada por la prolongada huelga del bus urbano

 Bros Group tiene entre sus clientes a FCC, uno de los principales contratistas del Ayuntamiento de Zaragoza

FCC Medio Ambiente, filial de ese grupo empresarial, ha resultado en esta legislatura adjudicataria de una contrata de limpieza viaria y recogida de basura valorada en 677 millones de euros (con IVA) a desarrollar en diez años por el Ayuntamiento de Zaragoza. Se trata del mayor contrato adjudicado por el consistorio de la capital aragonesa a lo largo de la legislatura que ahora está terminando.

Fuentes de la candidatura conservadora rechazaron que la coincidencia entre la cartera de servicios municipal y la de clientes de la empresa para la que trabaja la concejala pudiera suponer algún tipo de incompatibilidad para esta última, que hace unas semanas inauguró la remodelación de un parque ejecutada por esa compañía.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias